Descubre el Monasterio de Simat de la Valldigna.

La Comunidad Valenciana tiene auténticos tesoros, como el Real Monasterio de Santa María de la Valldigna, monasterio al que decidimos visitar y conocer su impresionante complejo arquitectónico, en constante restauración, que nos maravilló por completo. Realizamos una visita guiada de 1 hora de duración por sus inmediaciones y no dejamos de sorprendernos por su belleza, su historia y su gran importancia. Sin duda un lugar al que acercarse para pasar un buen día y disfrutar. Acompáñame en esta interesante visita, por uno de los monumentos más importantes que la Comunidad Valenciana tiene en su haber.

El Origen del Monasterio Simat de la Valldigna

El Monasterio de Santa María de la Valldigna se fundó por orden del Rey Jaime II El Justo. Cuenta la historia, que el rey tras luchar contra los musulmanes en la zona de Alicante y Murcia y de camino a Aragón, al pasar por este fértil y bello valle le dijo a su capellán y abad del monasterio cisterciense de Santes Creus “Valle digno para un monasterio de vuestra religión” y así, tras pronunciar estas palabras, se iniciaba la historia del Monasterio de la Valldigna.

La construcción del monasterio se inicia en el siglo XIV, tiempo en el cual trece monjes de la orden del Cister se instalaron y crearon su primera comunidad, que mantuvo la propiedad hasta 1835 momento de la desamortización.*

El Monasterio de Simat de la Valldigna está compuesto por diferentes construcciones de estilo gótico, destinadas para los diferentes usos necesarios en los quehaceres de la vida cotidiana de los monjes. En el interior del monasterio encontramos una iglesia, una capilla, un aula capitular, el locutorio, el claustro, el refectorio…

El monasterio ha vivido a lo largo de los años buenos tiempos y tiempos desfavorables, pero su decadencia llegó en 1835, cuando los procesos de la desamortización hicieron que el monasterio se pusiera en venta y que los monjes lo tuvieran que abandonar. En 1991 el monasterio fue adquirido por la Generalitat Valenciana, fecha en la que se inició también su restauración.

*La desamortización de Godoy o desamortización española, fue un proceso histórico, económico y social de finales del SXVIII que consistió en poner a la venta, por parte del estado, mediante expropiación forzosa y en subasta pública, bienes y tierras que hasta entonces estaban en manos de la iglesia católica y de distintas órdenes religiosas, con el fin de conseguir ingresos extra para amortizar los títulos de deuda pública.

Entrada Monasterio Santa María de la Valldigna

Visita al Monasterio de Simat de la Valldigna

Al llegar a Simat de la Valldigna y situarte frente al acceso principal del monasterio, te das cuenta de que tras esas murallas protectoras tiene que haber algo impresionante.

La entrada es el punto de reunión, en el que se fragua el grupo para la visita. Donde observamos la puerta de entrada, las torres y la hermosa fachada barroca de la capilla de la Virgen de Gracia utilizada por los monjes para los actos litúrgicos con la población. En definitiva, un recinto amurallado, que parece una fortaleza y que comprende los distintos edificios que forman parte del monasterio.

Tras una breve explicación sobre los inicios del Monasterio de Santa María de la Valldigna, entramos al monasterio por la Puerta Real y atravesamos el portal construido en el siglo XIV, tras observar los escudos colocados sobre la puerta, los de armas pertenecientes al abad que mandó su construcción y el escudo central perteneciente a la Corona de Aragón.

Fuente Entrada Monasterio de Simat

Una vez en el interior, nos damos cuenta de la magnitud y la belleza del Monasterio de Simat de la Valldigna, una joya del Patrimonio Cultural Valenciano y pieza clave para entender la importancia política y cultural del pueblo valenciano en la Edad Media. Una vez dentro miramos a lo lejos, una amplia plazoleta con árboles y una fuente central nos reciben.

La fuente del siglo XVIII, llamada Fuente de los Tritones, hoy la podemos ver en su correcto lugar de origen tras distintas ubicaciones, como los Jardines de Viveros de Valencia, debido a la Desamortización Española. Desde 2005 se puede disfrutar en la explanada central del Monasterio de la Valldigna.

Tras pasear por la plaza y observar la fachada de la iglesia, nos dirigimos a la parte derecha donde encontramos los restos de la llamada Obra Nueva, un edificio rectangular donde se encontraba el comedor común, la bodega y los dormitorios.

Mapa Edificios Monasterio Santa María de la Valldigna

Frente a estas dependencias encontramos el Claustro del Silencio, a su alrededor se congregan las salas más importantes como son la Iglesia, el Refectorio y la Sala Capitular. En el centro se sitúa el patio, el Claustro del Silencio es un lugar de inspiración para pasear, leer o meditar, donde los monjes elevaban su espíritu. Parte de este claustro y situado entre el patio y la iglesia encontramos una de las cosas más sorprendentes del monasterio, los restos de unos arcos que hacen las delicias de los aficionados a la fotografía, por la belleza de su decadencia.

Frente al Claustro del Silencio se encuentra el Refectorio o comedor, edificio rectangular de gran estructura y dimensiones, que todavía conserva el pulpito del lector en uno de sus muros. En los muros de este edificio, podemos ver restos de los intentos fallidos de su dinamitación, que datan del tiempo posterior a la desamortización, cuando el nuevo dueño de las tierras prefería tener más espacio para el cultivo, pero debido al grosor de sus muros y a la calidad de la construcción le fue imposible la demolición del edificio. Actualmente, se utiliza entre otras funciones, como sala de exposiciones.

Entre el Refectorio y la Sala Capitular encontramos un pasillo con dos arcos apuntados, destinados al área del Locutorio; lugar donde los monjes tenían permitido conversar. Este pasillo se encargaba de conectar el claustro con la plaza que hay tras de sí.

Al lado y frente al patio encontramos la Sala Capitular, un edificio construido siendo el abad Rodrigo de Borja, que más adelante sería el Papa Alejandro VI. La sala capitular era una gran sala con una bóveda de crucería estrellada como cubierta, en la que aún se distinguen los escudos de los Borgia y donde también destacan dos hermosos ventanales góticos; el uso de esta sala era el de una sala destinada a la lectura de los capítulos de la orden por parte del abad.

Al este de la iglesia encontramos situado el Palacio del Abad, todo un símbolo del inmenso poder del abad, que era a su vez el señor feudal de la mayoría de las tierras del valle. En este palacio se situaban sus dependencias y servía así mismo, para recibir a ilustres invitados. Destaca por su belleza el claustro realizado mediante arcos góticos y situado de nuevo en su lugar de origen tras haber estado ubicado, más de 80 años, en una mansión conocida como el Canto del Pico en Torrelodones, perteneciente a una familia de renombre. Fue en 2007 cuando el claustro volvió a reintegrarse en su emplazamiento original.

Y para finalizar el recorrido, nos dirigimos a la actual Iglesia Monacal que terminó su construcción en 1699. Anteriormente habían existido dos iglesias más que fueron derruidas por sendos seísmos.

La fachada principal austera y sencilla, contrasta con la suntuosidad del interior, en la que sobresale su atrio de estilo dórico y ornamentación churrigueresca muy recargada, único lugar de la iglesia al que podían acceder las gentes del pueblo. Observamos que se trata de un templo de cruz latina, con una única nave cubierta por una bóveda de cañón, reforzada por unos pilares que dan lugar a las capillas laterales. Destacable es la belleza de sus ornamentadas pinturas clásicas en la bóveda, que son todo un ejemplo del mejor barroco valenciano.

En el interior de la iglesia sientes la magnificencia del lugar, su poderío, su importancia, incluso un poco de temor por tanto despliegue de grandeza y poder. Al mirar a nuestro alrededor encontramos la zona donde se ubicaba el coro, la sacristía, el trono de Santa María y el camarín; percibimos que es un lugar con una energía magnética. Sus muros nos muestran su historia, la historia de un pasado de esplendor, mezclado con un pasado carente de glamur, como cuando la iglesia fue utilizada como almacén de naranjas, si observamos bien a día de hoy, encontramos restos de los cuños de las cajas en las paredes, así como desechos de fuego que hacían los operarios al tratar de calentar la sala. Actualmente, la iglesia sin culto suele acoger eventos de carácter cultural y musical.

Tras la visita a la iglesia volvemos a salir a la plaza de entrada, para dirigirnos a la antigua almazara recuperada como espacio cultural y sala de exposiciones del monasterio donde finalizará la visita.

Nosotros salimos maravillados con el esplendoroso pasado del Monastir de Simat de la Valldigna y sorprendidos por todos los tesoros que nuestros ojos han podido admirar.

Cómo visitar el Monasterio de Simat de la Valldigna

Normalmente el monasterio dispone de visitas guiadas diarias, pero debido a la situación sanitaria y las obras de restauración que se están efectuando, únicamente se puede visitar el Monasterio de Simat, concertando una visita guiada con antelación, poniéndote en contacto con la Oficina de Turismo de Simat de la Valldigna, llamando por teléfono al 962810920 o vía Whatsapp al 618020272. Las visitas tienen un aforo limitado y los grupos son reducidos, de ahí la importancia de reservar con antelación.

El precio de la visita al Monasterio de Santa María de la Valldigna

El precio de la visita es un precio módico que suele ser de 3€ por persona, independientemente de la edad de esta, aunque puede aunmentar levemente si se trata de una visita teatralizada o de carácter más especial.

Cómo llegar al Monasterio de Santa María de la Valldigna

Sigue esta indicación para saber cómo llegar al Monasterio de Simat.

Dónde alojarte para visitar el Monasterio de Santa María de la Valldigna

Una de mis webs de referencia es quehoteles.com aquí encuentro siempre los mejores alojamientos al mejor precio. Haz clic en el enlace para encontrar tu alojamiento perfecto en Simat o en sus alrededores, como Gandía o Cullera, para disfrutar de la visita y de una escapada con total comodidad.

Tras la estupenda visita, te recomiendo dar una vuelta por el pueblo y visitar un nacimiento natural de agua llamado la Font Gran y la Font Menor y las plazas que las envuelven, que son el centro neurálgico de la población. Continúa paseando y siéntate en alguna terraza a tomar algo y probar sus tradicionales cocas como la de mestall o sus famosos figatells.

Por la tarde, realiza alguna de las rutas que ofrece el municipio. Una visita que a mí me gusta hacer es la de la Ermita de Santa Ana, pregunta antes en Información y Turismo para poder visitar su interior. Esta ermita era anteriormente una de las mezquitas más importantes del Reino de Valencia y recorrer entre naranjos el camino hasta llegar a ella resulta una delicia.

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3 comentarios sobre “Una Día de Visita en el Real Monasterio de Santa María de la Valldigna

  1. Yo visite este monasterio por allá. de los años 80. y era deplorable,servía de almacén a un agricultor
    Luego lo visite en 2015. Y…me quedé sorprendido del cambio.
    Eso demuestra que si queremos…
    podemos.

    1. Hola Vicente,
      Yo no conocí el Monasterio de Santa María de la Valldigna en en los 80, pero sé su historia y tienes razón. Durante unos años el monasterio sirvió como almacén de naranjas de una empresa frutícola y el cuidado a un monumento tan importante no fue el adecuado. De hecho, a día de hoy, al visitar el Monasterio aún puedes observar vestigios del uso que se hizo en el edificio. Pero sí que es verdad que la mejora, la restauración y la importancia que se da actualmente al monasterio no es la de antaño. Como bien dices, sí se puede cambiar y rectificar. El almacén forma parte de la historia de este singular edificio, aportándole una singularidad más. Saludos.